BCN - Un turismo que acabó por hundirnos

En la entrega anterior conocimos con detalle como los dos viajeros superaron el primer día de libertad en Barcelona. Obtención de provisiones, reconocimiento de la zona y primeras cervezas Cruzcampo para sentirse como en casa. El tequila nunca supo tan bien, y las historias de terror nunca habían llegado a cobrar tanta vida.

Y tras ese último chupito pusieron rumbo a casa y descansaron para afrontar el resto del viaje. El turismo será la base a partir de ahora, conocer los bellos encantos de la capital catalana, y por supuesto todo eso os lo traen aquí con un toque de humor y algún que otro vídeo.

¿Preparados para terminar la aventura barcelonesa? Llega la tercera parte aquí, en aBOHRridos:

Llegó el domingo; Mike y Rubén se calzaron para comenzar su andadura libre visitando Barcelona. El plan era una carrera, las horas no sobraban para todo lo que querían hacer. Por supuesto el día comenzó con un contratiempo, y es que cambiaron el plan que habían comentado la tarde anterior por miedo a que el Park Güell cerrase el lunes, como ocurre con numerosas zonas de interés en Barcelona.

Salieron a la calle dirección al metro tras, hoy volvían a Vallcarca para visitar el famoso parque de Antoni Gaudí. Debieron afrontar una importante cuesta para llegar a su destino, pero finalmente consiguieron entrar en el recinto con un temor en el cuerpo. Para visitar el parque hay que pagar una entrada, cosa que por el momento no habían hecho, y los reductores se encontraban merodeando la zona. Eso los obligó a estar alerta, con la idea de salir corriendo si alguno se les acercaba.

Así se levantaba Barcelona en domingo

Pero, tras largo tiempo, se dieron cuenta que todo el lugar no era de pago. Buscaron la parte monumental y compraron su entrada, aunque no les quedó más remedio que pagar para las cuatro de la tarde. Así, ya iban a prisa el resto del día, pero merecía la pena. Recorrieron todo el parque tranquilamente, conscientes de que había que hacer tiempo, e incluso intentaron aprender a amaestrar palomas. A las afueras del parque, en una pequeña baguetería, compraron un par de bocatas para almorzar. Lo curioso de este rincón fue descubrir una gran pared cargada de firmas de todos los visitantes que habían pasado por allí, además de relojes con la hora de distintos países: Francia, España, Inglaterra, Italia... Tuvieron el orgullo de dejar allí su huella para la posteridad.

Conociendo el gran Park Güell, pero sin pagar ni un pavo aún.

Preciosa vista de Barcelona desde el Park Güell

Maravilloso rincón que descubrimos, estas cosas no aparecen en las guías...

...y dejamos nuestras firmas para el recuerdo: Michaelcito, Rubencito y aBOHRridos

Y por cierto, el intento de amaestrar palomas tiene un vídeo que os dejamos a continuación:

Visitaron, por fin, toda la zona monumental de Gaudí, donde el gusanillo arquitectónico de Mike se apoderó de él. Pasaron más de una hora recorriendo y haciendo fotos de aquel maravilloso lugar, para después volver hasta la Plaza de España y subir al fin la montaña de Montjuïc. Las numerosas escaleras imponían para comenzar el ascenso, pero no era la primera pendiente a la que se enfrentaban en el día, podían conseguirlo. Escalón tras escalón ganaban altura mientras atacaban una nueva tableta de Milka comprada previamente en el metro. En el camino pudieron disfrutar no solo de unas vistas increíbles de la Ciudad Condal, si no también de un momento "friki Star Wars" que queremos compartir con vosotros:

La zona de Antoni Gaudi, de pago, que nos hizo esperar hasta las cuatro de la tarde

La emblemática salamandra situada en las escalinatas

Paseando por toda la creación de Gaudi.. ¡cada columna es diferente!

 El vídeo del extraño friki-momento de Star Wars en Montjuïc:

Descubrieron que en lo más alto de la montaña se estaba llevando a cabo algún tipo de celebración, y tras admirar desde lo más alto toda la gran ciudad que al fin, tras mucho trabajo, habían conseguido visitar de nuevo, pasaron el resto de la tarde conociendo los rincones de aquel lugar, y con ello numerosas fotos. El Centro de Telecomunicaciones de Calatrava con el teleférico que conecta la montaña y la playa, el Palau San Jordi, la Fundación Joan Miró o el Jardí Botànic... Así pasaron las horas hasta que llegara el espectáculo de la fuente: agua, lunes y música se mezclan en un momento mágico, a pesar del frío que la noche que hay que soportar, aunque lo realmente insoportable era el cada vez más agarrado acento catalá de Rubén, que seguía ganando fuerza..

Jardines y más jardines en lo más alto de la montaña

Vistas de Barcelona frente al Palacio Nacional de Montjuïc

Y una foto algo más cómica del recorrido, porque no todo son paisajes

Terminado el largo día decidieron volver a casa y descansar los pies destrozados, de cara a un largo lunes de turismo, último para disfrutar. Antes de todo duchas y cena casera, compraron mostaza y queso, a pesar de su elevado precio, como capricho a un difícil día. Pero dos euros por cinco lonchas es para saborearlo durante el resto del viaje. Añadieron The Wolf Among Us y Plantas vs Zombies mientras Morfeo llegaba, y solo les faltó atrancar la puerta con el armario por miedo al hurto.

El lunes comenzó llevando a cabo el plan del domingo. Tras unas tostadas de mostaza del cheff Rubén tomaron camino hacia la Torre Agbar en un largo trayecto. El premio, ese prepucio de gran altura... sin explicación. Aún le están buscando lo bonito. Tras ello volvieron sobre sus pasos para llegar al Arco del Triunfo, y compraron el desayuno en una pastelería al lado de este. Bajaron por el Parque de la Ciudadela, donde hicieron una pequeña parada antes de continuar hacia la playa. Tras pasar completa la mañana caminando por toda la costa catalana, llegaron al fin al restaurante que tenían apuntado en sus agendas para almorzar.

Cogiendo fuerzas para el camino, aquí el desayuno del lunes.

Las farolas son una verdadera obra de arte en toda Barcelona

Cascada del Parque de la Ciudadela

Paseo marítimo de Barcelona, un largo camino acompañados del Mediterráneo

Y aquí unos nachos cortesía de Flherty's. Esto es solo el aperitivo

Superado la abundante comida, el plan de la tarde era posiblemente el más extraño y retorcido de la lista: Una visita a la Universidad de Barcelona (UB) para conocer de primera mano el trabajo de los químicos de la comunidad. Por si se nos olvidaba, esto es un Blog de Químicos, y conocer un poco de cómo se preparan allí los universitarios. Con este viaje, de ida y vuelta, se acababa el metro para los aventureros.

Las facultades de Química y Física de la UB

La Facultad de Química... demasiado. Siete plantas, numerosos departamentos, aulas que superaban en tamaño a la propia Aula Magna y una impresionante biblioteca que recogía libros históricos en una de sus salas que podía tener el mismo tamaño que una planta del CRAI. Nos superan, no tenían duda de ello. Además el campus universitario también ganaba de goleada a Sevilla. Si aquí tenemos un curioso césped y una fuente que nunca tiene agua, allí tienen unos amplios jardines que recogen, además de ciertas obras de Gaudí, el Palau Reial. Impactados ante tal superioridad de la UB, en los columpios del parque ambos aventureros se echaron a llorar, tenemos sus declaraciones en vídeo:

"Homenaje a los elementos" Una tabla periódica con los espectros atómicos

Una de las salas de la biblioteca que recoge libros históricos.

Aquí tenéis las vistas a disfrutar desde las ventanas de la facultad.

Vídeo: Rubén llora ante la superioridad catalana. "Nos han hundido..."

Aprovecharon que estaban en la zona universitaria para quedar con Ana y despedirse de ella antes de volver a casa. Ella les mostró la Facultad de Arquitectura, les presentó alguno de sus compañeros y pasaron un buen rato charlando y tomando un café en la terraza de la facultad. Llegadas más de las siete se despidieron, ella tenía que asistir a clase mientras Mike y Rubén continuaban con las últimas horas de su viaje. Se pasaron de forma fugaz por el Camp Nou y regresaron al que sería su último viaje de metro. Por cierto, en la vida subterránea del metro de Barcelona pudieron comprar un monster en un kiosko para despejarse, y curiosamente con descuento para estudiantes... ¿Aparentaban ser catalanes?

Típica foto en el Mare Magnum, donde se llevará a cabo la batalla entre palomas y gaviotas.

Regresaron a casa, aunque esta vez se separaron y dedicaron cada uno un tiempo a sus propias preocupaciones. Horas más tarde se volvieron a reunir para ir cerrando el día, y planear la despedida del martes. Por la noche decidieron jugar a comprobar si Rubén era capaz de imitar a Carri. Desgraciadamente, el catalá se había agarrado a su pecho cual oxígeno captando electrones, y no podía dejar de hablar así...

El último día, ya de nuevo en la calle sin hostal, lo dedicaron a pasear por las Ramblas, visitar tiendas locales y comprar algún recuerdo para el viaje. Por suerte, el extraño hombre del hostal les permitió dejar las maletas; y tras las compras de la mañana, robar un montadito y almorzar como despedida de nuevo un kebab en Kapadokya, las recogieron para poner rumbo al aeropuerto.

¿Alguno recuerda esa cafetería con libros de la que os hablamos?

Pues aquí el desayuno para un último día de viaje

Mercado de la Boquería:  podéis ver algunos de sus puestos.

Ya poco queda que contar, esperaron su vuelo y tocó regresar a casa, en diferentes filas dentro del avión. Mike consiguió pasar una lata de recuerdo, aunque le miraron raro; a la vez que Rubén comprobó que la culpa de que le paren en los registros para embarcar se debe a sus botas. Algo siempre se aprende, y además se completan más niveles del Plantas vs Zombies si tienes que esperar el vuelo.

Y regresamos a casa, solo queda que llegue nuestro vuelo...

Y así, casi sin quererlo, regresaron a Sevilla, y pudieron tachar al fin de su lista el ansiado viaje que durante tantos meses habían planeado, aunque las ganas de regresar aún se notan en el ambiente...

Bueno, y si esta última entrega os ha parecido mucho más llana y pasajera, os dejamos un último vídeo por el que merece la pena haber leído todo esto. ¿Recordáis el espectáculo de la fuente? Pues os lo hemos traído desde Barcelona, en vídeo y con especiales comentarios de nuestros aventureros. Disfrutadlo, es una maravilla que no podéis perderos si pisáis Barcelona

Gracias por aguantar estas tres entregas, esperamos que esta aventura para llevar el Blog más allá de Sevilla os haya gustado, sacado alguna sonrisa o incluso disfrutado con algunas imágenes o vídeos. ¡Un abrazo! Y hasta pronto, Barcelona.